miércoles, 25 de diciembre de 2013

La Nochebuena y las noches que no son buenas.

   Desde que he entrado en esta nueva etapa de "desengaño" o de "desamor" o simplemente de "corazón roto" mi peor momento es la noche. Durante el día estoy con la mente semi ocupada, pero las noches... Mi cabeza da vueltas por muy cansada que esté. Y cuando sueño, no tengo buenos sueños... Pero sin duda la peor noche ha sido Nochebuena. En Nochebuena durante años he visto amaneces, "dormitabamos" y comprartiamos historias, silencios y sueños hasta que el sol despertaba la ciudad. Y para mí estas noches tenían un sentido especial. Para mí. Como siempre para mí.

   Un amigo me recomendó que cuando me diera cuenta de que la noche se me iba a hacer larga hiciera una lista mental no ya de las cosas buenas, o de las malas, ni de lo que me gustaba ni de lo que no, eso ya es pasado y lo debo olvidar. Que hiciera una lista mental de qué deseaba que tuviera la persona que me fuera a acompañar en un futuro, haciendo una mirada hacia delante. Y eso he hecho esta noche. Ya no he pensado en que no me quiere ni en nada de eso, he centrado mi pensamiento en lo que deseo a mi lado, y en su defecto estaré sola.

   La persona que esté a mi lado debe desear besarme no sólo cuando quiera follar y quiero que me acaricie. Ah! Importante! Que no le importe besarme en la calle, que no le importe que todos sepan que estoy en su vida, no me importa que no seamos "novios" o que no pongamos nombre a nuestra relación, siempre que "estemos y seamos" los nombres y los calificativos que se los queden otros. No quiero sentir que todo lo que me gusta le disgusta, que lo único que le gusta de lo que yo elijo es mi ropa interior y que guste como cocino. No soy una persona romántica pero si detallista, quiero una persona que lo sea tambien, que sea imaginativo y me de sorpresas, no me importa que sean cosas sencillas, es más lo prefiero. Que me haga sonreir y reir, que baile como un payaso cuando haga falta, que empatice y que aunque sea un patoso baile conmigo en el salón y que cante aunque no sepa cantar. Quiero que me haga sentir guapa e importante para él, y no me importa que le mire el culete a otras o incluso diga burradillas de cualquiera, siempre que yo me sienta deseada. Que le guste viajar, no hacer turismo y que me haga participe de los lugares que le emocionen, que no me sienta excluida de su vida y sus sentimientos, que si su equipo de futbol cuela un gol me abrace y no me quede mirando a los lados sin saber que hacer o a quien abrazar. Quiero que me desee aunque tenga ojeras, que haya mucha pasión y originalidad, sin tabues. Quiero que me enseñe cosas nuevas, aprender de él. Quiero que escuche, no solo que oiga.Quiero que me eche de menos. Que no me regañe por darle calor en verano o porque tenga los pies frios, que me abrace en las noches de invierno y me de un beso después de tener sexo. Pero sobre todo que me trate bien, que no me haga daño, que me cuide, que me abrace si me ve llorar y que se deje cuidar por mí. Que me aporte certidumbre, que sepa que va a estar ahí siempre, no solo en las buenas, no solo cuando estoy bien. Ah! Y que sea independiente, odiaría estar en todo momento pegada a alguien, que no exista la idea de "pedir permiso", que tenga su mundo y su libertad al igual que yo, que tenga sus hobbies y sus momentos de estar solo, incluso de viajar solo o con su gente, que no tiene que ser la mía.

   Todas estas cosas pensaba mientras, este año sola, veía encenderse la ciudad, hoy anaranjada y amenazante prediciendo del temporal que luego llegó... También pensaba que no debo conformarme con menos porque a pesar de que se me ha olvidado, no merezco menos y lo debo recordar...


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